EEUU se vuelve a pronunciar sobre la reapertura de su Embajada en Cuba (video)

Emily Mendrala, subsecretaria de Estado Adjunta de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado ofreció este viernes declaraciones a Radio Televisión Martí sobre la reapertura de la Embajada de EEUU en La Habana y explicó por qué las vacunas de la isla no están contempladas en la entrada al país de los inmigrantes cubanos.

«El presidente Biden ha dado la orden de aumentar empleados en la Embajada de La Habana y está trabajando hacía el restablecimiento de ciertos servicios incluido los consulares», dijo la funcionaria.

«Nosotros estamos trabajando en eso, no tengo nada que anunciar en este momento, pero es algo de alta importancia para nosotros», agregó Mendrala que es de ascendencia cubana, según dijo el periodista Ricardo Quintana durante la entrevista.

Sobre las vacunas aclaró que hay una política a nivel mundial «que las personas que van a llegar por avión tienen que poder demostrar una prueba de vacunación con una vacuna que sea aprobada» por los órganos internacionales de salud, aclaró.

«Esta política se aplica a nivel mundial con muy pocas excepciones así que no es una política que está dirigida específicamente a Cuba». Escucha todo lo que dijo Emily Mendrala a continuación:

El Gobierno de Estados Unidos dio a inicios de septiembre pasado lo que se consideraba «un primer paso» en el refuerzo de su Embajada en Cuba con el objetivo de ampliar sus servicios en la Isla al permitir que sus diplomáticos estén acompañados por algunos familiares.

Así lo confirmó un funcionario del Departamento de Estado, que pidió mantener el anonimato, quien informó del cambio del estado de «sin acompañantes» a «parcialmente acompañados» para los diplomáticos destinados en la embajada en La Habana, informó EFE, según publica el diario independiente cubano 14ymedio.

«El presidente Biden se ha comprometido a reforzar la plantilla de su embajada en La Habana para asegurar nuestra capacidad de relacionarse con la sociedad civil y, en el momento apropiado, aumentar nuestros servicios consulares a los cubanos, a la vez que garantizamos la seguridad de nuestros diplomáticos en Cuba», señaló esta fuente a Efe. «Este es un primer paso en ese proceso», remarcó.

«Solo los miembros adultos elegibles de la familia empleados en la Embajada de Estados Unidos en La Habana podrán viajar o vivir en Cuba», dijo otra fuente de la Administración Bidel al Miami Herald.

La Embajada está contratando a miembros de la familia para cubrir un puesto de coordinador de la oficina de enlace comunitario y un puesto de enfermera. La embajada también está contratando un asistente de participación pública y un asistente político.

La evacuación del personal causó una interrupción significativa a las familias cubanas a través del Estrecho de Florida durante los últimos cuatro años. Actualmente hay más de 100,000 visas de inmigración atrasadas que no han sido procesadas porque los servicios consulares fueron cerrados en su mayoría.

El Departamento de Estado trasladó la tramitación de algunas visas de inmigración a Guyana, agregando formidables obstáculos económicos a lo que ya era un proceso largo y complicado.

También se suspendió un programa de reunificación familiar que permite que algunos solicitantes aprobados esperen sus visas en los EEUU, lo que deja a las familias desesperadas sin otro recurso que esperar.

Durante un viaje a Miami, el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, dijo que la administración estaba «muy concentrada» en encontrar formas de reducir la acumulación de visas, pero no ofreció más detalles.

Estados Unidos redujo de manera sustancial el personal de su embajada en Cuba en 2017 después de que treintena de diplomáticos estadounidenses sufriera unos misteriosos «incidentes de salud» cuyos motivos aún no han sido aclarados.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR: Gobierno de Biden: Las «circunstancias cambiaron» en la política hacia Cuba

El expresidente Donald Trump (2017-2021) acusó entonces al Gobierno cubano de ser responsable de lo que las autoridades estadounidenses calificaron como «ataques acústicos» o «sónicos», lo que sirvió como pretexto al entonces mandatario para romper con el deshielo diplomático con la Isla.

Un informe interno dado a conocer a principios de este año reveló que Trump acusó a La Habana sin pruebas y que la mala gestión y la falta de coordinación dominaron su respuesta a estos supuestos «ataques».

Aunque durante su campaña electoral, Biden prometió volver al deshielo con Cuba y dar marcha atrás a muchas de las sanciones impuestas por el expresidente Donald Trump (2017-2021), sus cálculos parecen haber cambiado desde que llegó al poder en enero de este año.